"Se han dado las cosas así, pero sin duda es mi mejor Roland Garros, jugando me siento muy cómodo en estos cuatro partidos, hay que seguir adelante y pensar en el siguiente partido y que no siempre va a ser así", dijo Ferrer.
"Ahora toca cambiar la perspectiva y lograr unas semifinales, que las he hecho en Australia y el US Open, y no en tierra, donde mejor me encuentro", comentó.
Ferrer admitió que toda la vida ha estado "en un segundo plano", detrás de Nadal pero que eso no le afecta y quiere seguir así.
"El 2010 fue muy bueno el 2011 también, y eso es lo que quiero. La experiencia hace que no caiga y me ha ayudado a jugar más tranquilo en Roland Garros. Ya no depende tanto de mí ahora", observó sobre lo que viene, "los jugadores son muy buenos".
Ferrer explicó que el "feliz cumpleaños que escribió en la cámara de televisión iba dirigido a su novia. "A Rafa también lo quiero, no tanto como a mi novia, claro, y ya le felicité ayer".
El de Jávea recordó que a pesar de sus 30 años, el tenis le había dado muchas oportunidades y mencionó su derrota en la final de Copa Davis ante Argentina contra David Nalbandian, y como luego había podido ganar dos mas. "Hay que seguir trabajando y adelante. No pensar mas allá, ni meterme presión.
"Ahora quiero hablar con Corretja y mi entrenador sobre el próximo partido, habrá presión pero al final es para todos. Cuanto más arriba, más presión porque te obligas a ganar más partidos. En cuartos contra Murray o Gasquet, la presión también es de ellos".
"Murray lleva muchos años con un nivel altísimo, no tiene un Grand Slam porque ha coincidido con tres fenómenos. Gasquet tiene un muy buen primer saque, mejor revés que derecha, es muy talentoso y volea muy bien, y con su público tendrá una motivación extra", dijo Ferrer sobre los dos jugadores con los que podría enfrentarse en cuartos.
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