El tenista español David Ferrer pasó ayer a la tercera ronda del Abierto de Estados Unidos tras un partido "difícil" contra el holandés Igor Sijsling, y afronta ahora el resto del torneo "pensando sólo en el próximo partido", tras reconocer que no está jugando a su "mejor nivel" porque está "cansado".
"Ahora paso a tercera ronda y cada vez se complica más. Sólo pienso en el próximo partido, no en que el Abierto pueda ser mío, porque no estoy jugando a mi mejor nivel, pero, aun así, intento estar centrado en los momentos importantes", aseveró Ferrer tras concluir el encuentro, que ganó en tres sets.
"Llevaba el partido bien encarrilado, con dos sets arriba, pero se me ha complicado un poco y ha sido difícil, me he ido ensuciando poco a poco y no he acabado con buenas sensaciones", explicó el valenciano sobre el encuentro, en el que obtuvo unas puntuaciones de 6-2, 6-3 y 7-6, con un 'tie-break' en el que se impuso 14 contra 12.
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