El tandilense peleó hasta donde pudo, dejó pasar algunas posibilidades favorables y terminó perdiendo el partido por 6-4, 5-7, 7-6 (2), 6-7 (6) y 6-3. Fue su mejor actuación en Wimbledon y el partido que no olvidará el tandilense, quien salió ovacionado del court central del All England, pese a su caída.
Fueron casi cinco horas de partido, donde los dos mostraron una gran solidez en su juego y pocas fallas en su servicio. Del Potro jugó, pese a las molestias físicas que tuvo en los partidos previos, en un buen nivel en el mano a mano contra el número uno del mundo. Tuvo, quizás, pequeños errores en momentos claves que inclinaron el partido en favor de Nole.
El tandilense cayó en el primer set. Todo comenzó muy parejo, ninguno de los dos tuvo casi errores con su servicio, aunque al N° 1 del mundo se lo vio más sólido. Apenas dos chances de quiebre hubo para Nole, una en el quinto game y otra cuando estaba 6-5 arriba. Del Potro falló dos drives y Djokovic se quedó con el primer parcial 7-5.
En el segundo las cosas fueron muy similares, aunque Del Potro logró quebrarle a Djokovic en la primera oportunidad que se le presentó. Se jugaba el séptimo game y el tandilense se puso 0-40, se quedó con el saque de Nole y terminó ganando 6-4. Esta larga batalla que libraron Djokovic y Del Potro dejó, en el tercer set, al serbio como ganador. Todo se definió en el tie-break, luego de que el tandilense desperdiciara las chances para quebrar en el séptimo game y que Nole no puediera ganar tres set points. Fue 7-2 en la definición para el N° 1 del mundo y el partido inclinado favorablemente para su lado.
El cuarto también se definió en el tie-break. Djokovic quebró cuando estaba 4-3 y parecía que se llevaba el partido con mayor facilidad, pero al game siguiente Delpo se recuperó.
En el último set los dos siguieron dando una batalla inolvidable. Con largos puntos, combinaciones de golpes que sólo dos tenistas de gran nivel pueden brindar un espectáculo único. El tandilense dejó pasar la chance que Djokovic le dio para quebrar, y el serbio pegó duro cuando tuvo la suya. Se quedó con el set por 6-3 y consiguió así el boleto a la final.
Para Del Potro no será un torneo más. Fue su segunda semifinal de Grand Slam (luego del US Open que ganó en 2009), la primera vez que llega tan lejos en Wimbledon y, lo más importante, que sabe que tiene herramientas para pelearle a los mejores jugadores del ranking.
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