Tenis y tenis de mesa

El tenis formó parte del primer programa olímpico en 1896 y se mantuvo hasta 1924. Sin embargo, desapareció de los Juegos hasta que regresó con carácter de exhibición en Los Ángeles 84 y se consolidó como deporte olímpico de pleno derecho en Seúl 88.

El origen de este deporte se remonta al siglo V a.C. y a un juego griego denominado sfairistiki, en el que los participantes golpeaban una pelota con el puño y el hombro.

Después evolucionó y los jugadores empezaron a usar una pequeña tabla atada a su antebrazo para golpear la pelota. Durante la Edad Media el tenis era un juego reservado a las clases sociales más elevadas y que se estableció como deporte en el siglo XVI en Inglaterra, donde Enrique VIII destacó como un gran campeón y se fabricaron las primeras raquetas, ajustándose también las reglas.

Tenis de mesa
Debutó en los Juegos Olímpicos en 1988 en Seúl y desde entonces se efectuaron diversas modificaciones en las reglas para hacerlo aún más popular y atractivo al público. En su origen estaba reservado para las clases aristocráticas inglesas.

Japoneses y chinos han sido tradicionalmente los dominadores del tenis de mesa. Los nipones controlaron esta disciplina deportiva durante los años 50 y los chinos les tomaron el relevo hasta mediados de los años 80, época en la que el equipo sueco frenó a los chinos y venció en los mundiales de 1989, 1991 y 1993.