Del Potro cerró la semana de la mejor manera y dejó en claro su gran momento, tras haber ganado en Tokio y alcanzar la final en el Masters 1000 de Shanghai.
Los primeros games del partido, a puro saque. El argentino mostró efectividad y firmeza con el primer servicio para abrirse paso: tuvo un 80% de aciertos en sus dos turnos iniciales, ganando 7 puntos de 8.
Del Potro se salvó con lo justo con su servicio y después golpeó con la devolución, en un game muy errático de Federer, quien falló tres derechas -una en el break point- e hizo una doble falta cuando tenía ventaja para el 4-4. No obstante, el argentino no supo aprovechar la ventaja y, sacando para set, tuvo un bache: perdió los cuatro puntos y le dio vida al suizo.
El argentino llegó a contar con dos set points, luego de que el suizo hiciera una doble falta. Era un momento anímico. Y Federer respondió con autoridad: ganó cuatro puntos consecutivos (desde el 15-40) y volvió a poner paridad (5-5).
La tercera fue la vencida para Del Potro, quien en el tie break sí pudo establecer la primera diferencia en el marcador. Consiguió una rápida diferencia, con agresividad y un servicio dominante, y se quedó con el desempate por 7-3.
El suizo sacó tajada de algunas dudas del argentino, tampoco del todo fino, y consiguió un quiebre para ponerse rápidamente 2-0 y quedó con una ventaja de tres games.
Federer, con buenos ángulos, una interesante movilidad de piernas y con su saque como mejor aliado, amplió la diferencia. Estampó un 6-2 en el marcador y llevó la definición a un set decisivo. Los primeros dos games del tercero pasaron a ser clave para el desarrollo del juego. El suizo no lo pudo cerrar, hizo un par de dobles faltas consecutivas y tiró un derecha larga para el 1-0 de Del Potro, que luego sacó adelante dos break points a puro saque y derecha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario