El tenista español Rafael Nadal se impuso ayer al búlgaro Grigor Dimitrov (6-3, 4-6 y 6-1), y logró con ello el pase a la final del Abierto de China, un año después de que el jugador eslavo le eliminara en los cuartos de este mismo torneo.
Hubo ambiente de revancha y se notó en el juego al límite de los dos en su intento de alcanzar la final de este ATP 500, que Nadal no gana desde hace 12 años.
Para romper esta racha, Nadal deberá vencer hoy en la final al australiano Nick Kyrgios, ganador de la otra semifinal a costa del alemán Alexander Zverev.
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